Vivir para comer y comer para vivir
La "Dieta" de un foráneo es toda una experiencia culinaria sin precedentes.
Imaginemos por un momento el estar en casa, con las personas que amas, disfrutando de ese delicioso sazón que solo tu madre sabe darle a la comida, donde comes hasta reventar, te sirves las veces que quieras y jamás se te pasa por la mente el preguntarte si mañana tendrás comida en tu mesa.
Puedo asegurarles que eso, es lo único que un foráneo realmente extraña.
En la vida de un foráneo, existen muchísimos altibajos, la mayoría de nosotros somos personas que solo siguen sus sueños, y lo hacen solos, por su propia mano. Uno de esos altibajos es la comida, cuando uno comienza a ser foráneo debes de olvidarte de restaurantes caros y lujosos, y por supuesto debes de comprender que la comida tendrá dos vistas diferentes, en primer lugar se da cuando recién tenemos despensa surtida, con comida suficiente y solo la imaginación para prepararla, pero la comida jamás te sabrá igual sin la experiencia de haberla preparado antes, ahí es donde extrañaras el sabor.
El otro punto, es al contrario, donde la comida escasea y debemos sobrevivir en base a comida instantánea, o alguna barata de la calle, es aquí donde la comida sabe a gloria y cada bocado cuenta, incluso llegar a desperdiciar algo es un pecado, y hasta una simple moneda ahorrada puede significar si comerás hoy, o mejor lo dejas para después...
Es en ese momento donde nos damos cuenta de lo difícil que es ganarse el pan de cada día, y nos volvemos expertos en manejar nuestra economía, y no solo por inteligencia como seria al vivir bajo el techo de tus padres, sin obligaciones de adulto como el pagar una renta, si no que en realidad lo hacemos por simple supervivencia y como sacrificio para lograr nuestras metas.
Los foraneos somos personas que hacen lo que sea por cumplir sus metas, y si eso significa no comer o najar las raciones para poder seguir adelante, estaremos dispuestos a pagar el precio.
Como reflexion, si tienes un amigo foraneo que viva solo por su cuenta, invitalo a comer de vez en cuando nunca sabes cuando fue la ultima vez que comio o si ese dia seras su salvador por un simple taco que le ofrezcas, puesto que para la mayoria de nosotros, cada comida es un manjar.
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